jueves, 11 de noviembre de 2010

Estampas casi invernales


Damas y caballeros, queridos todos, el frío ha llegado. Y se preguntarán ustedes, ¿no irá ahora el autor a ofrecernos un ensayo sobre las inclemencias del tiempo? Pues bueno, según se mire, el tiempo no es solo un tema al que recurrir cuando te encuentras en el ascensor al vecino del segundo con el que mantienes una agria polémica por el vertido incontrolado de migas sacudidas a las zonas comunes, no, puede ser el hilo conductor de la entrada de hoy.
Una de las más claras señales de la presencia del frío es la vuelta a su esquina habitual del puesto de churros itinerante, bueno itinerante según se mire que se pasa ahí quietecito desde octubre hasta abril. Su vuelta está perfectamente sincronizada con el levantamiento y retirada del otro negocio emergente que ocupa su plaza durante la canícula, el puesto de melones y sandías, en el que no soy muy bien mirado desde que mi perra saltó sobre el género expuesto, no sabiendo a día de hoy si lo hizo por constatar si la agresiva campaña de marketing del gerente romaní era cierta y realmente los melones eran a cala y a prueba o porque sencillamente confundió las sandías con balones.
       -Don Emilio, que se dispersa.
Venga continúo, el caso es que el puesto de churros, por su condición de nómada, no dispone de una salida de humos reglamentaria lo que conlleva un incremento sustancial en la polución del barrio básicamente porque al churrero el protocolo de Kyoto y la limitación de emisiones se la traen más bien floja.
La llegada de ese puesto es el detonante para que el pueblo baje a los trasteros o meta en los arcones los polos y bañadores y los sustituya por las prendas invernales. Solo se mantiene en el armario de uso diario la cazadora de entretiempo, sí, seguro que ustedes también tienen alguna, esas que gustan a madres y esposas por igual pero que a nosotros no nos acaba de llenar porque las prendas de abrigo deben ser oscuras, no de color siena tostado. Y se mantiene porque no sabes muy bien (ni quieres) cuando ponértela, y siempre tienes la excusa de que hace demasiado calor o demasiado frío para lucirla.  
Sumado a todo lo anterior, desde inicios de esta semana los más observadores se habrán dado cuenta de la llegada del frío por la vuelta a las pasarelas de la vida de viejos conocidos aparcados desde hace meses: pantalones de pana, chaquetas de paño, guantes, gorros y otras prendas que en su composición tienen en común al menos más de un 30% de gore-tex. Pero no se queden sólo ahí y huelan a su alrededor…así, así, ¿no notan algo más?  Sí, sí, huele a cerrado y a naftalina, y todo porque el frío ha sorprendido de repente obligando a sacar las prendas con el aroma que llevan macerando 6 meses en el canapé del colchón y porque no hay dios que saque a orear la ropa antes de ponérsela por el olor a churro que cogería si lo haces, aspecto este que te hace recordar con nostalgia los días del muy ecológico puesto de sandías.
Dicho esto, ayer 5.000 valientes atléticos decidieron hacer frente al frío espoleados sin duda por la inusitada ola de expectación que produce la Copa, sobre todo en sus primeras eliminatorias. Dichos osados, contaban como principal aliciente con ver a varias de las perlas de la cantera atlética en el equipo titular pero notaban algo más, olía raro, olía como a Polil y la afición reparó en que los jugadores de nuestra cantera huelen a cerrado y a naftalina, y no porque no valgan, no, que seguro que más de uno vale (y si no valieran seguro que lo compensarían con ilusión), huelen a cerrado porque el primo del compositor de “No dudaría” les ha guardado sin reparo en el arcón desde la pretemporada y saben que no van a salir más hasta que el calor de los siguientes torneos veraniegos vuelva a apretar.
Nuestros chicos del B, miran con envidia a sus compañeros en las selecciones inferiores del Barça, porque cuando los sacan del cajón salen con un perfume a lavanda que el entrenador ha colocado para ellos, porque los cuidan, porque se saben importantes.
Seguro que alguno de ustedes intentará argumentar que el sobrino de la Faraona es el descubridor de De Gea y Domínguez y que probablemente sea el entrenador de los últimos años que más ha mirado a la cantera y les responderé que no estoy de acuerdo, que simplemente ha tenido la suerte de encontrarse a dos jugadores con una calidad y una personalidad tan insultante que le hubiera sido imposible meterles en la bolsa de las mantas so pena de formar un alboroto.
Poco más que comentar salvo que, por lo que dicen las crónicas, Filipe estuvo suelto en el centro del campo, marcó Mérida y Diego Costa dio una preocupante señal del gusto que comparte con Reyes por los espacios diáfanos cerebrales, gusto que sabíamos latente desde  su paso por Valladolid. Dicen también que los chavales estuvieron bien (Perea, Pulido y Koke) y que todos demostraron que hay que contar más con ellos.
MI última reflexión es para decir que en partidos como el de ayer, si la directiva fuera como debe ser, se debía haber regalado a los que fueron al campo una manta y un chocolate con churros, aunque les hubiera dejado olor en la ropa, que para algo ha llegado el frío.

3 comentarios:

  1. Buenas tardes. Me encanta. Me encannnta el tema. Además, como ya cruzamos sables sobre él, durante el veranito ...

    Tengo que empezar hablando sobre Fran, chaval que he tutelado desde su llegada, a ciegas, basándome en un par de tonterías: a) Que es el primer Fran de la Historia del Atleti, lo que me hace ilusión. Qué bobada, ya lo sé. Y b) Que, hasta la llegada de Don Fernando a Anfield, e incluso desde entonces ex-aequo, mi equipo inglés es el Arsenal ... y su técnico, Wenger, el envidiable mejor creador de jugadores jóvenes del mundo contemporáneo, hasta que Pep llegó a La Masía. Así que es como lo de blanco y en botella: si es atlético, se llama Fran y viene del Arsenal ...

    Dicho lo cual, ayer metió un golazo, que no celebró porque es atlético de cuna, por lo tanto elegante, y por lo tanto consciente de que tan sólo evitó un ridículo intrascendente, pero de los que pican.

    Así que debe usted agregarle a la lista de canteranos asimilados, oiga. Es un yougurín, como los demás, y al menos tan atlético como el más atlético de los demás. Y ayer, como a los demás, por fin le dieron algo de cancha y respondió. Ya era hora. Con el calor que hacía cuando hablábamos de A. Perea o de Pulido ... y el frío que hace cuando por fin han debutado oficialmente.

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  2. Al final, Don Fran, va a conseguir usted que me sonroje.
    Vamos por partes, evidentemente el señor Mérida debe ser considerado uno más con el agravante de que al tener de ídolo desde pequeño al hijo más ilustre que ha parido Fuenlabrada, ha tenido la suerte de usar como espejo a un futbolista ejemplar en todos los sentidos, por profesionalidad, coherencia y amor a unos colores por citar sólo unos ejemplos.
    Creo recordar que ya en alguna ocasión se ha hablado en el otro foro sobre si el Atleti debería ponerse como modelo al Arsenal y yo personalmente opino que sí, pero con matices. Primero, aunque sea de cajón, el entrenador actual no serviría y ya hemos tenido suficientes pruebas de ello, segundo, de Wenger no me acaba de convencer las apuestas por jugadores tipo Gallas y que, no nos engañemos, no ficha muy barato (por ejemplo por Chamahk que les ha costado un pastizal).
    Esperemos que alguién oiga al menos nuestro clamor y no nos quedemos con ganas de ver a los chavales hasta el año que viene, pero me temo lo peor.

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  3. Pues le doy la razón, Don Emilio.

    Me sumo a lo de "con matices" respecto a Wenger, porque es cierto que aprovecha su cartel con la cantera, y el tema moral de haber aguantado como un machote los años de sequía por la construcción del Estadio ese tan enorme y tan rojiblanco (que no sé yo, con el encanto que tenía Highbury) para imponer inversiones dudosas. Y muy caras.

    Claro que ... el mismo Pep cayó en ese poderoso encanto del hago lo que quiero, con el tal Chygrinski (o como se escriba, que se fue tan pronto, que no me ha dado tiempo a escribirlo bien) o con el sueco con apellido serbio y mente tipo Reyes.

    Al propio Antic le pasó algo similar y Cruyff, mi admirado Cruyff, directamente se volvió loco fichando así como a cachondeo, cuando acumuló todo el poder.

    Estos entrenadores están muy locos. Bueno, Preciado no. Preciado es El Hombre del día.

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